domingo, 17 de mayo de 2015

Carta a Dulcinea, por Víctor Barrera

Alicante, 10 de mayo 2015





Querida Dulcinea:

Dulcinea de mi corazón, este honesto y amado caballero hace mucho tiempo piensa en ti.

Tanto se ha vuelto la obsesión, que el corazón de este el humilde caballero llora por ese amor. No quedan palabras para describir lo que siento por esta princesa, puedo conocer a mil mujeres pero ninguna se compara a tu belleza.

Puedo seguir hablando de tu belleza pero tendría que escribir más de mil cartas, así que con esta carta solo intento conquistar a la mujer que cautivó el corazón de este flaco caballero. Mi gran escudero Sancho llevará esta carta para ser leída por mi amada, tanto es el dolor que he de sufrir por no poder decir esto delante de ella, con su mirada clavada en mis labios.

Este corazón dolido por el rechazo de su amada solo puede mostrar dolor y sufrimiento, espero que mi amada recapacite el rechazo que dio a su gran amado.

Poder decir que la belleza de mi reina sobresale por todo, sobrehumana es y digna y merecedora es, de tener tan grande don. No podría compararla con las diosas porque realmente una diosa es.

Mi gran amada ha de saber que en este viaje con buen escudero, sufrimos tan atroz ataque de un maleante que quedamos seriamente dañados. No solo fue eso, también en mi estancia en una casa para descansar fui apedreado por la gente que loco me llamaba. Ya con mi fiel escudero sufrimos el ataque de unos gigantes, de donde tampoco salí victorioso; salí perdedor y malherido.

Esta gran valentía que tuve por continuar mi viaje aun así, siendo dañado varias veces, fue por conquistar tierras y darle buenos terrenos a mi amada, aparte de ser reconocido por la gente.

Te manda salud y un gran beso,



Víctor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario